Pequeña introducción.

La depresión, una enfermedad invisible o una invención para algunos.
Llevo aproximadamente 10 años viviendo de la mano de la señora depresión, y solamente hasta el año pasado no fui diagnosticada de Trastorno de Depresión Mayor y un trastorno de personalidad límite, y solamente desde el año pasado pude recibir algún tipo de ayuda. Muchos años de dolor y de falta de entendimiento por parte de los demás me han llevado a un desgaste que lo agravó. " No digas tonterías", " a ti no te pasa nada", " no hagas la vida imposible a tu madre", " baja de las nubes", " no me gusta la gente negativa, no te entiendo", etc. Montones de frases que he podido escuchar, yo sentía vergüenza de ello, tenía miedo de decir a alguien que me encontraba mal por si me decía que me lo inventaba o no tenía la actitud adecuada sobre la vida, y lo que era en realidad es una débil que no puede con sus problemas y no puede ser feliz como todo el mundo con las cosas que tiene, y desagradecida de la vida, como no.
Años de frustración y de vivir en bucle con pesadillas y ganas de llorar, soledad, sentimiento de vacío, tantos factores y sucesos desafortunados que me han llevado a donde estoy, que a día de hoy aún no sé si voy a tener un futuro o si acabaré mi vida próximamente.
Pero claro, todo esto suena trágico, pero podía haber sido peor. A finales del año pasado me dio una crisis, un ataque de ansiedad, se me fue la olla un rato y de allí ya no pude salir, solamente quería morirme, por dentro sentía que ya todo había terminado para mí, que no era capaz de ser una persona normal dentro de lo que cabe y llevar una vida normal. El cansancio ya era tan grande y tan profundo el vacío. Entonces decidí que iba a morir. Me había mentalizado, por la terraza saltaría y me imaginaba haciéndolo y lo veía tan posible, tan real, sentía que esos segundos de caída podrían ser mi libertad. Intente pedir ayuda de miles de maneras a lo largo de estos años y los resultados fueron muy tristes.
Por suerte me di una última oportunidad, por así decirlo, busqué un psiquiatra de pago (ya que el de la seguridad social me fue muy mal ), pero un psiquiatra que supiese escuchar, no esos 15 minutos donde no puede saber nada de ti. Una hora de consulta. Por una vez me sentí escuchada, eso marco tanto la diferencia, ser comprendida , escuchada. Al principio me daba mucho miedo y vergüenza ir allí y que me dijera que no que hay gente con problemas de verdad y tú aquí con tonterías, pero no fue así, por una vez fui escuchada y es una sensación tan buena. Es verdad, tomo antidepresivos, antipsicóticos y alguna vez ansiolíticos. Pero hasta hace poco no podía salir de casa y solo pensaba en morir y entonces todo cambio, ahora estoy con nuevos medicamentos y me encuentro mal la verdad pero la diferencia de antes a ahora es bastante grande.

Bueno aquí dejo una pequeña introducción a mi depresión, por si alguien se siente solo, perdido, no comprendido....así estamos algunos y aún en los peores casos se encuentra alguna salida o ayuda. Y bueno el psiquiatra, como no trabajo, lo pagaba limpiando por dinero y etc. aún así es un psiquiatra económico.
De paso os presento a mi precioso gatuno Slayer y un mensaje positivio.

Comentarios